La Comisión Europea está trabajando en reglas para garantizar el acceso justo a datos valiosos de automóviles para las empresas y la industria. El enorme potencial del mercado de automóviles conectados, que según la consultora Fortune Business Insights podría crecer hasta 400.000 millones de euros para 2030, ha desencadenado una lucha entre los fabricantes de automóviles y los usuarios por el acceso a los datos de los vehículos. Los fabricantes de automóviles buscan productos de software basados en datos y servicios de suscripción que cubran todo, desde los hábitos de conducción hasta el consumo de combustible y el desgaste de los neumáticos, como la próxima gran fuente de ingresos.
Sin embargo, la propiedad de los datos no está claramente definida en la legislación de la Unión Europea, lo que da lugar a la disputa actual entre los fabricantes de automóviles y quienes quieren acceder a ellos. “La Comisión está trabajando en la preparación de una propuesta específica del sector sobre datos en vehículos. Su objetivo será complementar la propuesta de Ley de Datos, publicada en febrero de 2022. En esta etapa no podemos prejuzgar el contenido de la evaluación de impacto final y el cronograma posterior para la adopción”.
Hay que regular, por tanto, en dos aspectos principales: qué datos recoge un fabricante (incluidos identificadores, datos biométricos, localización, datos de teléfonos sincronizados y perfiles de usuario) y el segundo grupo de información es a quién vende o comparte esos datos (filiales, proveedores de servicios, aseguradoras, administraciones públicas o corredores de Big Data).
Por otro lado, la ACEA, asociación europea que representa a los fabricantes de automóviles, se muestra contraria a dicha regulación de datos porque, según ellos, “representa una amenaza para la competitividad de la industria automotriz”.
“Los fabricantes de automóviles admiten el intercambio de datos de vehículos, lo que facilita que otros desarrollen algoritmos y servicios competitivos, pero no deben verse obligados a compartir el producto de su propiedad intelectual. Para proteger la competitividad de los innovadores digitales europeos, incluidos los fabricantes de automóviles, los responsables de la toma de decisiones deben asegurarse de no verse obligados a revelar datos derivados o inferidos a sus competidores.
Como tal, ACEA insta a los tomadores de decisiones a volver a la posición del Parlamento Europeo, que excluye los ‘datos derivados e inferidos’ de las obligaciones de intercambio de datos de la Ley de Datos”.
Fuente: ADSLzone.net