El pasado mes de febrero, The Wall Street Journal informó que diferentes organismos gubernamentales de los EE.UU. utilizaban los datos de localización de una empresa llamada Venntel para localizar a inmigrantes indocumentados y las rutas que utilizaban para cruzar la frontera.Esa misma Venntel se encarga de vender datos de localización que obtiene de usuarios de todo el mundo (de una manera muy compleja) a organismos estadounidenses como el FBI, el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) o la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP).
Eso es lo que ha querido demostrar Martin Gundersen, periodista que forma parte del medio de comunicación noruego NKR. Tanto a través de un artículo como de un sensacional hilo de Twitter, Gundersen ilustra cómo los datos de usuarios de todo el mundo acaban en data brokers estadounidenses.
Gundersen afirma que tiene 160 apps instaladas en su teléfono, y declara que «tiene la sensación de que le están espiando». Aunque quizás «no estén escuchando, están rastreando dónde estoy en todo momento».
«Todos mis movimientos son compartidos: cuando estoy comprando comida, tomando una copa o saliendo con amigos».
Este periodista decidió comenzar un «experimento» en febrero (precisamente, el mes en el que el WSJ destapó la información que comento al principio de este artículo). En un teléfono secundario, Gundersen instaló un buen puñado de aplicaciones y se dedicó a llevar ese dispositivo a todas partes.
Se trata, en este caso de un smartphone con Android, y algunas de las aplicaciones que instaló son bastante populares, como es el caso de ‘Sygic GPS Navigation & Offline Maps’ (con más de 50 millones de descargas en la Play Store) o ‘Fu*** Weather (Funny Weather)’ (que tiene más de un millón de descargas en la tienda de apps de Google).
Aunque, como decíamos, es bastante complejo descubrir y entender cómo empresas como Venntel consiguen o venden los datos, gracias a la GDPR desde la NRK pudieron solicitar documentación que ofrecen algo de luz en este proceso tan opaco.
«El 20 de agosto, pedí una copia de toda la información que Venntel tenía sobre mí. Todos los europeos tienen derecho a hacerlo, como resultado del GDPR, que fue adoptada en 2018».
Un mes mas tarde, este periodista recibió un email por parte de Venntel, que contenía información sobre los lugares en los que ha estado (en más de 75.000 ocasiones) desde el 15 de febrero. Un mes mas tarde, este periodista recibió un email por parte de Venntel, que contenía información sobre los lugares en los que ha estado (en más de 75.000 ocasiones) desde el 15 de febrero. Desde Venntel también le dejaron claro que habían compartido estos datos con sus clientes. Sus clientes (no han querido especificar quiénes son) podrían usar esta información para propósitos como la aplicación de la ley federal y la seguridad nacional. Sigue leyendo →